El gulash o goulash húngaro es una receta de estofado tradicional. En su origen era un plato de los que llamamos pobre; a base de carne de vaca, cebolla, manteca y sobretodo paprikka (pimentón dulce). A lo largo del tiempo, esta receta ha ido evolucionando y cambiando, y se han añadido otros ingredientes, como otras carnes, patatas, pimientos rojos, tomates y especias.
Hoy en día nos encontramos con el hándicap de que andamos faltos de tiempo y vamos casi corriendo de un lado a otro. Este guiso es un plato completo con gran cantidad de verduras y carne, pero se cocina a fuego lento, y requiere bastante tiempo…. Por eso, he decidido traeros una versión evolucionada más sencilla y rápida, pero no por ello menos sabrosa!
Os animáis? Manos a la obra!
Ingredientes: (para 4 personas)
- 500 gr de solomillo de cerdo o pechuga de pollo.
- 1 cebolla grande
- 1 pimiento verde
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento amarillo
- 2 zanahorias
- 1 hinojo
- 1 manzana
- 4 dientes de ajo
- 2 cucharaditas colmadas de pimentón de la Vera dulce
- 5-6 hojas de albahaca fresca
- 50 gr. De hojas de rúcula
- Cilantro molido
- Sal y Pimienta negra
- Aceite de oliva
- 1 yogurt blanco natural
Como preparar:
Ponemos una sartén al fuego medio con un poco de aceite de oliva. Mientras se calienta, pelamos y cortamos todas las verduras en juliana.
Colocamos las verduras en la sartén y salteamos.
Picamos 4 dientes de ajo muy pequeñitos y los añadimos. Sazonamos con sal, pimienta, y las dos cucharadas de pimentón dulce. Podéis utilizar también el picante, lo importante es que sea ahumado, para que le dé mejor sabor. Añadimos las 5-6 hojas de albahaca fresca y removemos.
Mientras las verduras cogen sabor, prepararemos la carne.
Cortamos el solomillo en medallones de 1- 2 dedos de grosor. Condimentamos con Sal, pimienta negra y cilantro molido y golpeamos un poco para ponerlos tiernos e impregnar el sabor en la carne cruda.
Ponemos una sartén tipo grill con aceite de oliva a fuego alto, y hacemos el solomillo. Si no queréis utilizar solomillo, podéis repetir el mismo procedimiento con medallones de pechuga de pollo.
Una vez que esté hecha la carne por ambos lados, apartamos y reservamos.
Ahora volvemos a la verdura. Añadimos el tomate frito, podemos usar tomate triturado en crudo, pero tendremos que dejar que se haga más tiempo y ajustar la acidez. Con el tomate frito es más rápido. Volvemos a remover para que el tomate se impregne de los sabores del resto de las verduras, durante 4-5 min.
Cogemos una fuente y colocamos las verduras. Pondremos encima los medallones de carne y la rúcula esparcida, y echaremos el yogurt en cucharadas salteadas por encima.
Que aproveche!