El atún encebollado, aquí en la provincia de Cádiz, donde la pesca es uno de los medios más antiguos de subsistencia, es un plato muy típico. Es una de esas recetas de toda la vida, que puede sacarte de más de un apuro por su facilidad y rapidez de preparación.
Además, este plato está lleno de nutrientes. El atún es un pescado azul, que posee un 12% de grasa, lo que lo convierte en un pescado graso, pero se trata de una grasa rica en ácidos grasos omega-3, que ayuda a disminuir los niveles de colesterol y de triglicéridos en sangre y a hacer la sangre más fluida, lo que disminuye el riesgo de aterosclerosis y trombosis. Y además contiene vitaminas B2, B3, B6, B9 y B12. El contenido en esta última supera al de las carnes, huevos y quesos, alimentos que son fuente natural de esta vitamina. Y no contiene nada de gluten por lo que también es 100% apta para celíacos!
En mi casa solemos hacerlo bastante a menudo, y con una copa de vino, se acompaña que da gusto.
Os cuento como lo hacemos..
Ingredientes: (para 4 personas)
- 800 gramos de atún
- 3 cebollas medianas (aproximadamente 750 gramos)
- 2 dientes de ajo
- 10 cucharadas de aceite de oliva (unos 100 ml)
- 1 chorreón de vino de Jerez
- 1/2 vaso de agua
- 1/2 cucharada pequeña de pimentón dulce
- 1/2 cucharada pequeña de orégano seco
- 1 hoja de laurel
- sal y pimienta negra
Como preparar:
Ponemos una sartén alta o una cacerola mediana con aceite de oliva a calentar a fuego medio-alto. Mientras coge temperatura, pelamos la cebolla y la cortamos en tiras largas y finas. Pela el ajo y córtalo muy pequeñito, para que no se note tanto al final del plato.
En cuanto al aún, necesitamos que esté cortado a cuadraditos de unos 2 centímetros de lado. Puedes hacerlo fácilmente en casa, pero si no, pídele al pescadero que te lo corte “para encebollar” o “a taquitos”.
Sazonamos el pescado con sal y pimienta molida al gusto.
Cuando el aceite esté caliente añadimos el atún para que coja algo de color (si ponéis el fuego fuerte, conseguiréis sellarlo rápidamente dejándolo jugoso por dentro).
Una vez que esté un poco dorado por todos lados, los sacamos de la sartén y los reservamos. (Intentad no poner todo el atún a la vez en la sartén, ya que sólo conseguiréis que suelte mucha agua y no se doren, se cocerán; lo mejor es añadirlo en un par de tandas)
Ahora ponemos en la sartén un poco más de aceite a calentar y echamos el ajo para que se dore. Cuando haya tomado color, añadimos la cebolla, la hoja de laurel y media cucharada pequeña con sal.
Dejamos a fuego medio hasta que la cebolla esté bien tierna (entre 20 y 30 minutos), ya que está va a ser la base de nuestro plato. (Cuanto más bajo este el fuego y tiempo se lleve, mejor caramelizará la cebolla.)
Cuando la cebolla esté en su punto, subimos el fuego y añadimos el chorreón de vino para despegar todos los sabores que dejó el atún en el fondo de la sartén, rascando con una paleta de madera y esperamos que se evapore el alcohol.
Una vez hecho esto, apartamos la cacerola del fuego y añadimos el orégano y el pimentón y removemos durante unos segundos.
A continuación añadimos el agua y el atún que teníamos reservado, y dejamos a fuego medio hasta que se evapore el agua.
Comprobamos el punto de sal y añadimos al gusto.
Que aproveche!