“Costillas guisadas con patatas” Una de las recetas más tradicionales de nuestra zona son las costillas guisadas.
Esta receta era muy habitual en las casas por ser barata y sencilla, pero a pesar de su humildad es de lo más sabrosa, la salsa esta buenísima y las patatas cogen todo el sabor de la carne que resulta de lo más jugosa y tierna.
Se hace con ingredientes comunes y económicos. La base es un sofrito de tomate, pimientos y cebolla,… Aunque algún truquillo tendrá para que a nuestras abuelas y madres les salieran para chuparse los dedos.
Manos a la obra?
Ingredientes: (para 4 personas)
- 700 gr de costilla de cerdo
- 1 cebolla grande o 2 medianas
- 1 pimiento verde grande o 2 medianos
- 2 tomates maduros o 1 lata de tomate troceado de 410 gr
- 2-3 dientes de ajo
- 200 ml de vino fino de Jerez
- 1 hoja de laurel
- Sal y Pimienta
- Aceite de oliva
Como preparar:
Necesitaremos que la costilla este cortada en trozos. (Podéis comprarla en los supermercados, normalmente envasadas en bandejas), sino podéis pedirle al carnicero que os corte las costillas para guisar.
**Yo en este caso compré la pieza de costilla entera y la troceé en casa. Si es vuestro caso, es muy sencillo de hacer. Necesitáis una buena tabla, un cuchillo de chef y una hachuela.
**Con el cuchillo de chef, cortareis la pieza entre huesos de la costilla, dejando las costillas largas. Con los dedos tantearéis estos espacios intercostales. Con este mismo cuchillo, cortareis las partes blandas que hay al final de los huesos de estas costillas en trozos más pequeños.
**Una vez que ya solo os quede por trocear la parte que tiene hueso, utilizareis la hachuela. Con el cuchillo del chef hacéis un corte por la parte más blanda para indicar el lugar en el que tenéis que partir con la hachuela y con la hachuela partís mediante un golpe seco.
Ahora que tenemos nuestras costillas listas, ponemos una cacerola mediana con aceite de oliva a calentar a fuego medio-alto. Salpimentamos la carne la pondremos en la cacerola por tandas para que se sellen bien. Una vez tostaditas, los vamos sacando y reservando en un plato aparte.
Picamos los tomates, la cebolla, los pimientos y los ajos finamente y los ponemos a pochar en la misma olla donde hemos dorado las costillas. Primero los ajos, pimientos y cebolla, y pasados unos 5-10 minutos, ponemos el tomate.
Una vez esté listo el sofrito, metemos de nuevo las costillas en la olla y añadimos el vino, y daremos vueltas hasta que se evapore el alcohol. Esto servirá para que la carne se ponga tierna más fácilmente.
Cuando haya evaporado el alcohol, sazonamos con sal y añadimos la hoja de laurel y el agua hasta cubrir la carne de manera generosa (2 dedos por encima). Dejamos la olla a fuego medio tapada, durante aproximadamente 30 minutos, contando desde el momento que empieza a hervir.
Mientras se cocina, podemos cortar unas patatas para acompañar el plato. Las pelamos, cortamos a cachos, desgajando en el último tramo de corte del cuchillo en la patata. Tiene que sonar como un pequeño chasquido!
Una vez pasados los 30 minutos, incorporamos nuestras patatas para que se cocinen durante otros 15-20 minutos.
Cuando haya terminado el tiempo, pincharemos la carne y las patatas para ver si están tiernas y en función de eso, dejaremos o no más tiempo.
Si está listo, sólo queda servir!
Que aproveche!
